sábado, 15 de marzo de 2014

Experiencia personal de la Hna. Angie: Dios nos dice que los marcados con el chip RFID no heredarán salvación, pues ya dejan de ser personas conscientes, no tendrán voluntad

Hace unos días tuve una experiencia muy vivida que creo en el Señor es para compartirla con la iglesia. Fue desesperante, estaba en la realidad de los dejados atrás, yo era uno de ellos, estábamos escondidos en una azoteas, pilares macizos de concreto. Fuera nos rodeaban una serie de seres fuertes, rápidos muy fornidos, se veían de contextura gruesa, que atacaban a los dejados atrás era una especie de cacería. Yo razonaba en la realidad, o sea consciente de que estaba en una visión, y veía que a los que atrapaban, los atacaban, muy parecidos, a lo que muchos hermanos denominan zombis. 


Yo razonaba: “Esto no se parece a las películas que los actores principales se salvan, no acá realmente los matan y me horrorizaba ver esta situación. Escapábamos a lo más alto de ese lugar, al parecer allí no podían trepar, les faltaba la destreza, pero de pronto, aparecía un hombre ante mí que era una especie de doctor, con dos mujeres, me inmovilizan de manos y piernas, querían colocar una marca en mi muñeca derecha, un chip, de los que estábamos allí yo al perecer era la única apercibida de lo que sucedía, los demás no tenían idea lo malo que era esto, al perecer no tenían raciocinio …


Forcejeé y me agoté hasta lo imposible porque como dije era una experiencia real, gritaba retorciendome, pidiendo que no marcaran mi mano, lo que vi era una inyección grande, entonces clamé con todas mis fuerzas a la protección de Cristo hacia el cielo; de inmediato el hombre me soltó y no pudo marcarme, pero una de las mujeres alcanzó a inyectarme la pierna derecha de costado arriba del tobillo, al momento tuve una visión espiritual, vi que lo que me inyectaron fue una enfermedad o un virus, lo que miré fue igual que una radiografía azul, en azul oscuro veía correr o diseminarse el líquido por mis tejidos…. fue una inyección más chica que la que iban a colocar en mi mano y reaccioné al ver esto, y me comencé a apretar el agujero que había dejado la jeringa y parte del líquido, lo vi salir en un hilo, pero lo que quedó comenzó a hacer que alrededor de la zona aparecieran algunas ampollas no pude seguir viendo más porque el ruido de una maquinaria me hizo mirar desde el edificio hacia afuera, y vi que enormes maquinas estaba demoliendo edificios alrededor, pensé que nos venían a rescatar pero no fue así.


Lo que en verdad sucedía…. era que dos de estos seres estaban manejándolas. Uno era una especie de pala mecánica muy grande y empujaba las construcciones, estaban frente a nosotros, la otra era una especie de mano mecánica que tomaba o arrancaba partes de las construcciones, entonces pensé nos van a matar, pero dentro,  una voz me dijo NO, lo que desean es acorralarlos porque no pueden matarlos, ustedes son su alimento…


Y Allí salí de eso dando las gracias al Señor, aunque fue una experiencia horrorosa, detecté varias cosas: que la marca será real y tangible, no una marca por medio solo de una tarjeta o algo por el estilo. Y por lo que vi en las otras personas no tenían voluntad y estaban marcados. Esto me explica por qué Dios nos dice que los marcados no heredarán salvación, pues ya dejan de ser personas conscientes, no tendrán voluntad. Quizás el chip que colocarán será tan potente que los someterá absolutamente, esos seres para mi parecían engendros humanos diabólicos, parecían endemoniados, me hizo recordar las plagas…


Doy gracias al Señor porque me permitió ver que significará el quedarse atrás, será terrible, insoportable ver y experimentar ese caos que asolará a la humanidad que no acepta a nuestro Señor Jesús. Ojalá este testimonio sirva para alertar a algunos hermanos desapercibidos, no esperen ese tiempo, será terrible en verdad vivirlo; me di cuenta que muchas personas que hablan de estos seres, será una realidad….

Dios les guarde y les bendiga