sábado, 6 de junio de 2015

En el Reino Unido te multan por ser mendigo y pedir lismona y en EE.UU te despiden si eres la encargada de un comedor escolar y das comida gratis a los niños hambrientos

El Reino Unido otorga el poder a los consistorios de controlar el desorden público que causa la mendicidad o los sin hogar mediante la imposición de multas de 100 libras.

Calificar a una persona de molesta por dormir en la calle puede estar abierto a debate para algunos viandantes que miran a otro lado al pasar por delante de un vagabundo. Sin embargo, el pueblo cuestiona el plan ya que lo considera de injusto.

Lugares como Oxford, con una gran afluencia de turistas, o el barrio de Hockney, en el este de Londres, están liderando esta forma de erradicar el problema que suponen los vagabundos, sin embargo organizaciones sociales afirman que estos últimos no suelen ser los causantes de los problemas.

El desempleo o la depresión son algunos de los factores que pueden llevar a alguien a perder su techo. Aquel que se encuentre en esta situación estará cometiendo un delito dependiendo de donde se encuentre pues ahora al crimen de ser vagabundo se penaliza con multas de hasta 100 libras.

Desde las distintas organizaciones sociales que han denunciado esta práctica, se indica que la solución a este problema pasa por más diálogo y por más vivienda social de precio asequible.

Aunque el Gobierno Conservador llevara en su manifiesto la creación de 200 mil viviendas sociales al año durante la legislatura, o garantizar el derecho a compra de aquellos inquilinos que vivan en una vivienda social, la erradicación de los problemas pasa, según estas organizaciones caritativas, en empezar a tratar a los vagabundos como personas con una necesidad en red de tratarlos como problemas.



En un colegio infantil en Aurora, en el estado estadounidense de Colorado, despidieron a la jefa de un comedor sólo porque daba gratuitamente comida a niños que pasaban hambre y no tenían dinero para pagarlo.

"Si veo llorando a una niña de cinco años que me dice que tiene hambre y que no tiene dinero, siempre le voy a dar comida", se defendió Della Curry.

Por otra parte, confesó que "yo odiaba ver cómo la comida iba a parar a la basura. Odiaba ver cómo se desechaba la comida que podía haber sido dada a estos niños que tienen hambre".

Sin embargo, el directivo del centro educativo dictaminó que el comportamiento de la mujer es "intolerable", con lo cual debe ser despedida, informa ABC News.

Fuentes: HispanTV y RT.