"La corrupción extrema y la maldad de la nación inglesa ha provocado la justa ira de Dios. Cuando la malicia haya alcanzado la plenitud de su medida, Dios, en su ira, enviará espíritus malignos a los ingleses, para que los castiguen y los quebrantarán luego con gran severidad, al separar el árbol verde de su matriz y contendrá la longitud de tres estadios. Pero al fin este mismo árbol, por la misericordia compasiva de Dios, y sin ningún tipo de ayuda nacional, volverá a su raíz original, se regenerará, y el oso encontrará fruto abundante".
La profecía se refiere al parecer el regreso del Inglés al catolicismo, para ser seguido por las bendiciones de la abundancia. Contradice a St. Columbcille, que les niega ese perdón.