Un nuevo estudio llevado a cabo en Suecia indica que hablar por el móvil e incluso por teléfono inalámbrico puede provocar la aparición de cierta forma de cáncer cerebral.
© REUTERS Kai Pfaffenbach / imágen ilustrativa
El estudio, publicado en la revista 'Pathophysiology' el pasado octubre, analizó 1.498 casos de personas con tumores cerebrales malignos y realizó 3.530 controles para determinar si el uso del teléfono tiene relación con el desarrollo del cáncer, informa el periódico 'The Huffington Post'.
De acuerdo con los resultados del estudio, cuanto más tiempo una persona utilizaba un teléfono celular o inalámbrico, más propensa era a desarrollar gliomas, un tipo de tumor que se forma en el cerebro o la médula espinal y que es maligno en el 80% de los casos.
"El riesgo es tres veces más alto después de 25 años de uso. Lo hemos visto claramente", explica el investigador principal del estudio, doctor Lennart Hardell.
Los científicos afirman que los participantes en el experimento que habían estado usando el celular o inalámbrico durante menos de un año corrían menor riesgo que los que habían estado usando el teléfono en el mismo lado del cuerpo desde hacía años.
El motivo de preocupación por los teléfonos celulares es la energía de radiofrecuencia, un tipo de radiación electromagnética emitida por los dispositivos móviles, explican en el Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU. Estas ondas, según los investigadores, pueden ser absorbidas por los tejidos del cerebro, aunque todavía no se sabe cómo puede afectar esto el desarrollo del cáncer.
El doctor Gabriel Zada, un neurocirujano de California, señaló a Reuters que los niños podrían estar particularmente en riesgo debido a que tienen la cabeza más pequeña, el cráneo más delgado y mayor conductividad cerebral