Willaru Huayta es un mensajero espiritual inca de Cuzco, Perú. descendiente de indigenas quechuas, aprendió a recibir la verdad esotérica durante sus búsquedas espirituales en las profundas selvas del Amazonas. Hace algunos años se le pidió que viajara a la gran ciudad, Cuzco, como Chasqui (mensajero) de la Gran Hermandad Blanca con mensajes relacionados con los tiempos de transición en los que vivimos. Al salir de las selvas sólo hablaba quechua. No tenía medios de subsistencia, sólo la fe en los Maestros. En sólo unos pocos años Willaru ha aprendido español e Inglés y su mensaje se ha extendido por todo el mundo. Ha logrado esto al vivir su verdad, que está apoyada únicamente por donaciones. Willaru afirma con fuerza que no es un maestro, un chamán, o cualquier otra forma de herencia jerárquica. Él simplemente dice que es un estudiante de la vida.
Las profecías de los incas (como transmisión de Willaru Huayta, un peruano descendiente del pueblo Quechua) reflejan su antigua religión solar, cósmico, universal. La tradición se mantiene viva, sobre todo en la selva amazónica, el reducto final y santuario de la tradición de la sabiduría del Imperio Inca.
Las profecías incas afirman que durante los últimos cinco mil años, el águila del norte y el cóndor del sur han estado volando por separado, y sera cuando vuelen juntos, algo que de hecho ya está empezando a suceder , que la gente va a empezar a hablar de nuevo desde el corazón. las tradiciones incas adoptaron los ideales de la Atlántida, la vieja cultura de la tierra que fue destruida por un gran cataclismo hace miles de años. Los supervivientes de esta tierra iluminaron todo el mundo conocido, habían creado el centro de su civilización en la América del Sur, entre otros lugares. Sin embargo, su religión fue corrompida por la entrada de los españoles, que eran enemigos del Sol, y la humanidad desde entonces se ha depravado. Los científicos no son capaces de ver el mundo multidimensional, que es el espíritu que está en el cerne de las viejas costumbres, y el materialismo se convirtió en dominante. Mucho antes del año de 1750, el gran Inca Shora Atahuallpa advirtió a los soldados del Sol de la que la humanidad rompería su relación con las fuerzas de la naturaleza, la humanidad perderia su camino y los pueblos han de adentrarse en la oscuridad. Sin embargo, los cambios ya están en curso.
Sus visiones han demostrado que la humanidad entro en la era de Acuario en el año de 1962, y que esta quinta generación solar reúne en sus períodos iníciales la formación del desarrollo. Entre 1962 y la Convergencia Armónica de 1987, las personas habían empezado a recibir mensajes y habrian comenzado a activar sus poderes internos para que les fuera posible el completar su misión en la Tierra.
Declara que:
"Los cataclismos son en el presente el camino hacia la transición, pero los humanos no tenemos la necesidad de preocuparnos por ello . La Tierra temblará, el aire estará lleno de huracanes , el océano tendrá olas inmensas y el Sol tendrá el gran calor. El año de 2013 es el fin del calendario inca . "
Dice Huayta:
"El cataclismo llegara en el año 2013, cuando un gran asteroide con un enorme campo magnético, tres veces más grande que el campo gravitacional de Júpiter, se acerque a la Tierra y su fuerza será tal que activará la Purificación de la Tierra. Cuando el cataclismo haya pasado, los sobrevivientes retomarán su vida y se dará inicio a una nueva civilización. La quinta generación desaparecerá con el cataclismo, pero puede ser la semilla de la sexta generación, si nos ponemos en contacto con el interior llevaremos la luz a nuestras vidas."