Se intensifican en Río de Janeiro las protestas contra el Mundial Brasil 2014. Hace tres días, la policía de 5 estados sedes del Mundial se ha declarado en huelga, exigiendo mejoras laborales e incremento de salario. Estas protestas y los retrasos, ponen en peligro la celebración de este gran evento deportivo. El astro del fútbol brasileño, Pelé, ha criticado el retraso de las obras en algunos estadios, que todavía no se han construido por completo y ha alertado, de que el 25% de los turistas extranjeros que querían ir al Mundial 2014, han cancelado su viaje al ver la intensidad de las protestas.
Una internauta brasileña llamada Carla Dauden explica las razones del malestar de muchos brasileños para protestar por el hecho de que el Mundial de fútbol se celebre en su país. La Copa del Mundo de fútbol supone un derroche excesivo de los impuestos de los ciudadanos brasileños. Aunque El Brasil forme parte de las economías emergentes, todavía existen recortes en el sistema educativo o en el sistema sanitario. La expulsión de muchos ciudadanos de sus casas por parte de la policía y la muerte. Una parte importante de los ingresos acabará en manos de la FIFA y de los brasileños ricos y aunque muchos brasileños puedan hacer caja durante unas semanas con este evento. La Copa del Mundo de fútbol no supone beneficios económicos ni creación de empleo para la mayoría de los habitantes de Río de Janeiro.