jueves, 21 de mayo de 2020

En España no hay monarquia sino pornocracia



Si no se lo creen todavía, puede que muchos empiecen a creerselo cuando empiecen a leer este artículo. La pornocracia es un término de origen italiano acuñado por el cardenal Caesar Baronius y se refiere a un gobierno que se caracteriza por la intromisión de cortesanas en los asuntos públicos. Concretamente, señala a una etapa de la historia de La Iglesia Católica caracterizada por la influencia de 2 mujeres sobre el papado durante el siglo X. Teodora, esposa del senador romano Teofilacto I, y la hija de ambos, Marozia.

Antes de que Letizia Ortiz Rocasolano apareciera en escena, los medios de comunicación españoles ofrecían una imagen intachable de Los Borbones.

Felipe de Borbón apostó por casarse con una mujer procedente de clase media, con un pasado de izquierdas, republicano y ex simpatizante del Subcomandante Marcos y el EZLN, una licenciada en ciencias de información, que había trabajado en varios medios de comunicación y que por supuesto, no formaba parte del grupo de amistades de Felipe de Borbón. ¿Cómo se conocieron? La versión oficial dice que fue Pedro Erquicia quien les presentó, aunque hay una versión extraoficial, de la que pueden encontrar información en Internet en un artículo titulado "Doña Letizia huele a mora".

Letizia Ortiz Rocasolano ocultó un interrupción voluntaria del embarazo (aborto voluntario) con la complicidad de Felipe de Borbón y la ayuda del primo de ésta, David Rocasolano, que es abogado y ahora vive exiliado en el extranjero después de publicar su libro "Adios Princesa" y denunciar que la monarquía española funciona como la Mafia. En su libro, aparece como prueba un documento que indica que Letizia Ortiz Rocasolano se le practicó un aborto en la clínica Dator de Madrid con fecha 27 de Octubre de 2002. Según el Derecho canónico, un aborto voluntario supone la excomunión automática. La boda no tiene validez. Hablando en plata, ese matrimonio como tal, no existe. Otra cosa es que la jerarquía de la Iglesia Católica haga la vista gorda, al igual que con muchos casos de pederastia que se han dado en su seno. Por lo tanto, no podemos hablar de Letizia como una reina consorte sino como una cortesana que vive en Palacio y tiene una relación extramarital con Felipe de Borbón.

Los amigos de Felipe de Borbón, la despreciaban y la apodaban "La Chacha". La Reina Sofía al igual que El Rey Juan Carlos tampoco la querían y la humillaron en numerosas ocasiones. Letizia terminó enemistándose con las hermanas de Felipe de Borbón también con el paso del tiempo.

Letizia se sentía una persona solitaria, marginada y humillada en un entorno profundamente clasista pero como Felipe la quería, aprovechó para alejarlo de su entorno más próximo. Una vez fue preguntada por un medio de comunicación sobre su familia y ella respondió: "Mi familia es Felipe y mis dos hijas."

Aunque muchos no apostaban porque Letizia llegase a ser Reina, algunas fuentes próximas a la Casa Real, consideraron que si la veían como reina porque era muy tenaz y no paraba hasta conseguir lo que quería. De hecho, Juan Carlos I la definió como "lista". Puede que Peñafiel tuviese razón con que Letizia no sabía de protocolo, pero aprendió a manejar los hilos desde la sombra.

Si repasamos la definición de Pornocracia, observarán que es un tipo de gobierno bajo el influjo de las cortesanas. Las diferentes acepciones de la palabra cortesano o cortesana del diccionario de la RAE encaja a la perfección con Letizia.

1. adj. Perteneciente o relativo a la corte.

2. adj. Que se comporta con cortesanía.

3. adj. Dicho de una mujer: Que ejerce la prostitución, especialmente si lo hace de manera elegante o distinguida. Una dama cortesana U. t. c. s. f.

4. adj. p. us. cortés

5. m. y f. Palaciego que servía al rey en la corte.

6. m. y f. Persona que sirve obsequiosamente a un superior.

7. f. Mujer de costumbres libres.

Letizia supo aprovechar los casos de corrupción de Iñaki Urdangarin,La Infanta Cristina y de su suegro Juan Carlos I. Con el pretexto de limpiar "La Institución", hizo ver que la monarquía solo se podría salvar si Juan Carlos I abdicase en su hijo Felipe. La elite política y económica española e internacional también presionó y aconsejó la abdicación a Juan Carlos I del que dicen que en su discurso de abdicación, lloró en más de una ocasión. Aunque a veces, Letizia pierde batallas, como sucedió cuando se enfrentó en público con la Reina emérita Sofía, que quería posar en una foto con sus nietas. La enemistad entre ambas mujeres radica que La griega se puso de parte de Iñaki Urdangarin y La Infanta Cristina. Letizia quiere ser el centro del universo: O estás conmigo o estás contra mí.

Es cierto que Letizia no hace lo que le da la gana. Pero ha conseguido cargarse en parte la tradición de La Familia Real de veranear en Mallorca. "Las tradiciones están para romperlas", llegó a decir; al sentirse marginada por el grupo de amigos pijos de Felipe y amigos empresarios y banqueros de El Rey Juan Carlos I.

Según el cronista de la Familia Real, Jaime Peñafiel: Letizia echó al perro de Felipe de palacio pues detesta a los perros y gatos como mascotas.

Letizia también hizo una serie de imposiciones del colegio donde estudian sus hijas y que han hartado a los padres de los demás alumnos, imposiciones tales como diseñar el menú que los alumnos tienen que comer o la prohibición del uso de teléfonos móviles en el recinto educativo.

Letizia es una mujer controladora y obsesiva con la educación de sus hijas, les prohibe llorar en público y aceptar regalos, a ver películas en versión original, y a estudiar clases de chino, de inglés protocolario, de gallego, euskera y catalán.

Detrás de los discursos del Rey o las Infantas Leonor y Sofía, está la mano de Letizia, según algunos medios de comunicación.

Como princesa Letizia se atrevió a predecir: "Yo seré Reina y mi hija (Leonor) me sucederá". Fuentes cercanas a La Casa Real, cuentan que Letizia iba diciendo a sus subordinados que su marido era un pusilánime, que cuando El Rey Juan Carlos quedase fuera de juego, ella sería la que mandase. Letizia nunca ha tenido vocación de geisha o de mujer florero.

Tienen poder pero no es absoluto. Saben que una espada de Damocles pende de un hilo que se va haciendo cada vez más fino. En cualquier momento, se puede repetir lo que ocurrió con Juan Carlos I. ¿Por qué?


  1. Felipe no tiene carisma y muchos consideran que estaba al corriente y es partícipe de la corrupción en su familia.
  2. Letizia cae mal a mucha gente que apoyaba incondicionalmente la monarquía. La ven como una nueva rica de manual, una déspota sin sangre real, ruin, caprichosa, amargada y pirada.
  3. La corrupción ha dañado la imagen de la Monarquía y de Los Borbones, especialmente, entre las nuevas generaciones de jóvenes que consideran que no les deben nada.
  4. El discurso tardío sobre el Coronavirus y la ausencia de una condena a la corrupción de su padre, les ha dejado en mal lugar. Estos reyes llevan pocos años reinando y la monarquía ya suspende en valoración según algunas encuestas, que lo más probable estén manipuladas y sesgadas.

Cuando algunos echaron en cara a Maquiavelo que había enseñado a los príncipes a ser unos tiranos. Él respondió: "También enseñé a los pueblos a derrocar a los tiranos". De esta institución anacrónica que se hace llamar monarquía pero que funciona como pornocracia solo quedan cuatro: Letizia, Leonor, Sofía (la hija, no la suegra) y Felipe.

Espero que la misma Casta invisible que echó a Juan Carlos I sepa valorar este artículo si lo llegan a leer. A esta pornócrata y su rey consorte les putea un Don Nadie.

A por ellos, que son pocos y cobardes.

Fuente: meneame.net