La libertad de NorteAmérica perderá su luz y su antorcha no alumbrará como ayer, el monumento será atacado dos veces (Benjamin Solari Parravicini)
Interpretación: El viernes, 26 de febrero de 1993, a las 12:18 PM, una gran explosión destrozó el aparcamiento público del World Trade Center. La explosión arrojó un balance de seis personas muertas y más de 1000 heridos, y originó casi 300 millones de dólares en daños materiales. El 11 de septiembre de 2001 (comúnmente denominados con el numerónimo 11-S en España y Latinoamérica; 9/11 en el mundo anglosajón) fueron una serie de atentados terroristas suicidas cometidos aquel día en los Estados Unidos por miembros de la red yihadista Al Qaeda mediante el secuestro de aviones de línea para ser impactados contra varios objetivos y que causaron la muerte a cerca de 3.000 personas y heridas a otras 6.000, así como la destrucción del entorno del World Trade Center en Nueva York.
Al margen de estos dos ataques, algunos pueden considerar que no se refieren al monumento en si, sino a lo que representan. Todos sabemos que EE.UU. en el pasado era considerado un paradigma de libertades en Occidente y en el mundo entero, pero últimamente, a raíz de los atentados, se pretendió invertir los valores tradicionales de la sociedad estadounidense, cambiando paz y libertad por seguridad e iniciar una guerra contra el terrorismo internacional.
No descarto, que esta psicografía haga referencia a un evento futuro, mas grave que los anteriores, que sería la destrucción de la ciudad de New York por ataque terrorista nuclear o un tsunami que causaría cuantiosos daños materiales. En la psicografía se observa como un mar agitado y como unas olas parecen arrastrar a las personas, anegar e incluso desmoronar los edificios. El origen de ese tsunami puede ser una gran explosión, que se puede apreciar al fondo, en la parte inferior y a la izquierda de la psicografía.
