Sueño de Kenyi Saito sobre Puerto Rico a la edad de 11 años
(en la madrugada de finales de julio 2013)
"En mi sueño me encontraba en mi casa con mi familia. Estaba yo en otra área de la casa , cuando me da por dirigirme al cuarto de mi mami, y veo que en la TV local ( TV nipona ) estaban pasando el noticiero – cuando fijo mi mirada y mi atención decía : Puerto rico.
Estaban pasando la gravisima noticia de un mega- terremoto super-potente de 13 grados. ¡En la escala de Ritcher!
¡Ooh ! ¡Al ver esta noticia tan impactante caí desmayado con gran angustia!. Me quede así por espacio de unos minutos
Pero recupere el sentido y dije : “Oh, En Japón también va a temblar!” e inmediatamente comenzó un temblor de tierra aquí en mi país ! Y lo comencé a sentir … y desperté !
Pueblo de Dios debo aclarar que esta experiencia la tradujo la mamá de Kenyi Saito, pues el niño es japonés y no habla español; tampoco ha visitado Puerto Rico, por lo que no conoce lo que Jehová ha advertido en juicios para este país. Su mamá es servidora de Nuestro Señor Jesucristo y así le ha inculcado, con muchas luchas en un país totalmente ateo, el temor de Dios a su familia.
Sabemos que la Palabra se cumple eficazmente en este tiempo final, y Dios esta intimando mas y mas con nuestros niños, levantándolos como voceros (profetas) de Su Palabra y advirtiendo el tiempo profético que vivimos.
Hablamos y somos diligentes en seguir avisando lo que El Espíritu habla en este tiempo, es nuestro deber y comisión.
{En aquel tiempo habló Jesús y dijo: «Te Bendigo, oh Padre, Señor del Cielo y de la Tierra, porque has ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, pues tal ha sido tu beneplácito. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo, sino el Padre; y al Padre nadie lo conoce, sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera revelarlo.
Venid a mí todos los que estáis apenados y sobrecargados, y yo os aliviaré. Tomad sobre vosotros mi yugo y aprended de mí, porque soy manso y humilde de corazón, y encontraréis alivio para vuestras almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera» (Mt 11, 25-30).
Y volviéndose a los discípulos les dijo en particular: ¡Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que vosotros veis y no lo vieron, y escuchar lo que vosotros escucháis y no lo escucharon (Lc 10, 21-24).}
El que tiene oídos, oiga lo que habla el Espíritu a su pueblo, Apoc 3:22
Sueño entregado a este ministerio Todo lo Puedo en Cristo,Inc Leillian Rivera y este ministerio lo entrega al pueblo entendido de Dios.
A DIOS LA GLORIA!
.
