El salario de la reina Isabel II de Inglaterra aumentará el próximo año en más de un 5% hasta trepar a 40 millones de libras esterlinas (unos 68 millones de dólares), de acuerdo a la Casa Real británica.
La subvención anual de la Reina, que cubre los costos de labores oficiales de Isabel II, proviene del llamado Crown Estate, que agrupa las propiedades públicas de la soberana como Regent Street, el Windsor Great Park, el hipódromo de Ascot y, por su puesto, el palacio de Buckingham.
Desde abril pasado, la subvención soberana (Sovereign Grant) quedó establecida en el 15% de los beneficios del Crown Estate, lo que suponía unos 31 millones de libras (52,6 millones de dólares).
Ese dinero es destinado a Isabel II para que cumpla con las funciones oficiales de la Casa real, mantenga a su personal y a las residencias.
Sin embargo, la cifra será elevada a 40 millones de libras desde abril de 2015, luego que el Crown Estate reportara ingresos por 453,5 millones de dólares.
Ese aumento se lleva a cabo a pesar de que en enero pasado la Comisión de Cuentas del parlamento británico pidió a la Casa real que reduzca sus costos y aumente los ingresos, y entre otras medidas abra al público el palacio de Buckingham cuando Isabel II no está en la residencia. El palacio de Buckingham abrió sus puertas por primera vez al público en el verano de 1993 a fin de recaudar fondos para reparar el castillo de Windsor tras el incendio de noviembre de 1992. Pero en la actualidad sólo está abierto al público cuando la soberana no está en residencia.
El Comité, encabezado por la diputada Margaret Hodge, publicó un informe sobre las cuentas reales, en el que criticó la gestión de las finanzas de la Casa real y consideró que pueden hacerse ahorros. Mientras, cuentas oficiales del Palacio de Buckingham revelaron hoy que un tercio de la subvención a la Reina es destinado a mantener los palacios reales.
Las cuentas detallaron que más de 6,8 millones de dólares fueron gastados para transformar el Palacio de Kensington, antigua residencia de la princesa Diana de Gales y de la princesa Margarita, en la actual residencia de los duques de Cambridge y su hijo, el príncipe Jorge.
Las tareas de remodelación incluyeron la remoción de amianto, la instalación de un nuevo sistema de calefacción y agua caliente, la reconversión del sistema eléctrico y una decoración “simple”.
El portavoz de los Duques de Cambridge indicó que los muebles y la nueva cocina fueron pagados por la Familia Real.
“Antes de que comenzara el proyecto, la residencia estaba en mal estado. La última vez que había sido restaurada fue en 1963″, declaró un vocero del Palacio de Kensington. Las cuentas de la Corona indican que el gasto para mantenimiento de propiedades reales aumentó de 4,2 a 13,3 millones de libras (7,1 a 22,6 millones de dólares).
También aumentaron los gastos por viajes de los miembros de la Realeza.
Según la Casa Real, el costo de los británicos para mantener a la Monarquía- excluyendo los gastos de seguridad- es equivalente a un penique de libra por semana por cada persona en el Reino Unido.
Por su parte, Sir Alan Reid, tesorero de la Corona, dijo que el financiamiento público de la Monarquía cayó un 8% “en términos reales” en los últimos dos años, cuando se deducen los costos por mantenimiento de palacios.
“Tenemos la responsabilidad de manejar las operaciones reales de la forma más eficiente posible”, afirmó el funcionario.
“En nuestra opinión, estamos haciendo una buena tarea a la hora de maximizar la relación calidad-precio”, concluyó.
Fuente: http://www.librered.net/?p=34015