En San Petersburgo (Rusia) han descubierto planchas, hervidores y otros electrodomésticos procedentes de China que pueden espiar a sus dueños.
“No es ninguna broma”, dijo a los medios el director de una empresa importadora de electrodomésticos. “En la aduana se descubrió que la carga pesaba más de lo previsto. Al investigarlo, descubrimos que los hervidores tenían instalados microchips que buscan wifi y transmiten los datos a un servidor extranjero”.
El radio de alcance de estos electrodomésticos podría ser de unos 200 metros, suponen los especialistas. “Una plancha podría alcanzar los 200 metros. Un teléfono puede encontrar un wifi no protegido con contraseña en unos 50 o 60 metros. Empiezan a buscar la conexión justo después de ser encendidos, sin permiso de su propietario. Estamos investigando qué datos pueden transmitir”, dijo el director de otra empresa. “Por el momento no hay una amenaza global, pero es mejor que la gente lo sepa”, añadió.
Entre 20 y 30 electrodomésticos ya han llegado a las tiendas, que se han visto obligadas a suspender las ventas de los productos chinos.