Tal vez usted no lo sepa pero en Irán, Irak y todos los países musulmanes, no se puede practicar el cristianismo abiertamente, de hecho si un musulmán cambia su religión está conminado a recibir la pena de muerte.
En Irán por ejemplo, donde el 99% de la población es musulmana, los cristianos han comenzado a reunirse secretamente para hacer reuniones de oración y alabanza. A esto se suma que jóvenes menores de 30 años, que no conocen de la historia de la Revolución Islámica de Irán, de 1979, son los más entusiastas en la difusión del evangelio.
Hoy día una red de iglesias clandestinas operan en Irán debido a la represión que ejerce el estado sobre los no musulmanes, aunque los cristianos solo representan el 0.33% de la población.