El modelo neoliberal que se impuso en Chile después del derrocamiento del gobierno de la Unidad Popular trajo como consecuencia el acaparamiento de recursos naturales en sólo un puñado de chilenos, y para la mayoría, el decaimiento de sus niveles de vida y el deterioro de su hábitat; sobre todo en lo que atañe a sus recursos acuíferos. Ya desde el año 2012, Petorca fue declarada zona de emergencia hídrica. En el presente, agricultores y líderes sociales de esa región denuncian que con dificultades habrá agua después de diciembre en nueve décimas partes de su territorio.
